lunes, 18 de mayo de 2015

MUMFORD & SONS: RENOVARSE PARA MORIR.


Desde primeros de Mayo podemos disfrutar de WILDER MIND el último trabajo de MUMFORD & SONS que supone un punto de inflexión en la carrera de esta banda porque rompe con el sonido folkie característico de sus dos aclamados trabajos anteriores -sonido que muchos pensamos que siempre sería "su sonido"- para acercarse más al pop o al rock.
Uno de los responsables de esta nueva aventura es el productor James Ford cuyos trabajos adscritos al electropop y el dance con otros artistas se encuentran en las antípodas de lo que Marcus Dravs hizo con esta banda en sus dos primeros álbumes.


Mucha gente se preguntaba cuanto tiempo aguantaría MUMFORD & SONS como banda folkie y algunos profetizaron que llegaría el día en que se pasarían al pop-rock convencional. Nosotros ni hicimos demasiado caso, ni tampoco les quitamos la razón. Porque sabemos que esta banda tiene potencial para defender otros registros y hacerlo bien. Lo único que nos esperábamos un par de discos folk tan buenos como los primeros antes de dar este salto que, si os somos sinceros, estamos tardando bastante en digerir. Y no somos los únicos. La crítica ya ha hablado: The Guardian y All Music los han sentenciado con dos y dos estrellas y media respectivamente.
Es cierto que en este blog siempre decimos que admiramos a los artistas que se la juegan e intentan hacer cosas diferentes. Pero en este caso, nos parece arriesgadísimo este salto a la piscina. Precisamente porque muchos creímos que Mumford & Sons había encontrado su sonido en esos banjos totalmente ausentes en WILDER MINDS, que en una primera escucha suena como muchas otras bandas europeas algo rutinarias. Pero, desde luego que ya no suenan como Mumford & Sons. Ni posee la magia de sus álbumes anteriores.

BELIEVE


THE WOLF


TOMPKINS SQUARE PARK



SNAKE EYES



DISCOGRAFÍA SELECCIONADA

-Wilder Mind 2015

PÁGINA OFICIAL

http://mumfordandsons.com/home/



Las discografías de los artistas que más admiramos no son perfectas. Muchos cometen errores. Quizás sea pronto para catalogar WILDER MIND como una equivocación. Porque seríamos bastante injustos ya que no es un mal disco. Pero va a gustar mucho más a gente que no le gustaba la banda que a sus seguidores habituales. 
A nosotros nos ha gustado menos que sus dos trabajos anteriores, porque nos han recordado a bandas anodinas como Kodaline e incluso The Script con la alargada sombra de (los peores) U2 siempre presente. Que vuelvan los auténticos Mumford & Sons cuanto antes, por favor.

6 comentarios:

  1. Personalmente nunca les he encontrado tanta brillantez como se presume a los chavales de Mumford, confieso que a pesar de los premios me aburren un poco, o al menos el disco de una sentada me cuesta digerirlo. Según parece este último trabajo pretende llegar a más y más lejos, con dosis de Almax incluida para mejor digestión. No sé, lo poco que he oído me suena mucho a otras cosas... ya lo oiré.

    Un abrazo.

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  2. @ Sergio

    A mi sus dos discos anteriores me parecieron muy frescos y novedosos. Además de que marcaron tendencia y provocaron como un revival Folk con bandas que salieron a la palestra como "The Lumineers" o "The Head and The Heart". De las que hablamos por aquí.

    Me parece bien que quieran probar otros registros, pero no es sensato matar a la gallina de los huevos de oro. Porque no tiene ninguna gracia comprar un disco de Mumford & Sons que NO SUENE A Mumford & Sons. Y si por lo menos el cambio de registro resultase igual de fresco y novedoso que sus primeros álbumes, yo sería el primero en quitarme el sombrero. Pero es que esto suena a otras bandas bastante quemadas.

    Así que o desaparecen para siempre o vuelven al Folk con sus banjos y su sonido acústico. Esas son sus dos únicas opciones.

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  3. Creo que su trayectoria comercial les llevará por el primer camino pero sin el ánimo de desaparecer.
    Tiempo...

    Saludos.

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  4. @ Sergio DS

    Sí. Yo creo que también. Además... Todas las buenas bandas tienen algún disco fallido en su discografía.

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  5. @ Sergio DS

    Me refería a bandas buenas de verdad. Y artistas legendarios. Coldplay no es que tenga discos fallidos, tiene discos directamente muy malos.

    Por ejemplo. Van Morrisson con lo prolífico que es que tiene chorrocientos mil discos, no todos son buenos. Incluso Bob Dylan. Y ese es el tipo de artista que más admiro, el que también se equivoca.

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