Sinceramente, no teníamos previsto escribir nada sobre 25, el último álbum de ADELE. Porque no creemos que necesite ningún tipo de divulgación por parte de los blogs, cuando se ha previsto que puede batir todos los records de ventas inimaginables de la historia. Pero por la fidelidad de haber sido de los pocos blogs que hablaron de ella cuando nadie imaginaba que llegaría a ser quien es hoy -Ni ella misma se lo hubiera imaginado jamás-, lo vamos a hacer.
Mucha gente piensa que tras el éxito de 21, los Grammy y el Oscar recibido por la canción de la película Skyfall, Adele se había retirado por un tiempo única y exclusivamente para ser madre. Eso no es del todo cierto. Porque desde el momento que dejamos de saber de ella, se inició la gestación de 25. Entonces, comenzaba a pasarle factura el grandísimo éxito obtenido hasta ese momento. Todo el material que escribía no le parecía lo suficientemente bueno y se sintió bloqueada. Pero no paró hasta arreglarlo: Se puso en contacto con productores y compositores para que le echaran un cable. El primero al que recurrió fue a nuestro querido Rick Rubin que le espetó que lo que le había enseñado "carecía de profundidad" y tras esta dura crítica, Adele deshizo todo lo que tenía compuesto en ese momento, y empezó de cero. Curiosamente, Rubin no aparece en la lista de productores que han intervenido en el álbum. Y casi hasta el día de su lanzamiento, 25 ya era más famoso por las canciones desechadas, que por las que contenía. Especialmente las que compuso junto a Tobias Jesso Jr y Sia Furler -Afortunadamente Sia ha recuperado dos de estas canciones para su álbum-
Nosotros tenemos ya un veredicto para el disco. Sus esfuerzos para no bajar el listón de 21 han dado sus frutos, pero tampoco lo sube. Las canciones son perfectas para su voz y lucimiento When We Were Young escrita por Adele y Tobias Jesso Jr puede ser la nueva Someone Like You de este álbum. Los temas que trata, son sus temas recurrentes de siempre, aunque ella diga que 21 era un disco "de ruptura" y que este 25 es "de reconciliación". ADELE es y será siempre The Queen of Broken Hearts. Y si fuera otra cosa, no funcionaría.
De hecho, uno de los temas nuevos en su vida sobre el que componer es la maternidad y pensó sabiamente que si dedicaba un disco monográfico a este tema iba a ser un auténtico aburrimiento. Y lo redujo a un único corte: La canción Nº11 Sweet Devotion está dedicado a su nuevo estatus de madre.
Entre los productores del álbum nos encontramos con Danger Mouse, Samuel Dixon, Paul Epworth, Greg Kurstin, Max Martin, Linda Perry, Ariel Rechtshaid, Mark Ronson, Shellback, The Smeezingtons y Ryan Tedder. Os aseguramos que los hemos recortado y pegado de una ficha técnica del disco, porque hubiera sido imposible memorizarlos todos.
El disco se presenta de momento en una edición normal con 11 cortes. Nosotros no nos daríamos mucha prisa en comprarla, la verdad. Existe también una edición limitadísima -y carísima- con tres canciones más. Recomendamos que compréis la segunda y que si tenéis que esperar un tiempo a que deje de ser "limitadísima" y "carísima" que lo hagáis. Seguro que acaba bajando de precio. Es más, casi mejor que escuchéis este disco en Spotify y que no lo compreis hasta las Navidades del 2016, que seguro que para entonces lo reeditan con un bonus-track bastante completo y con algún single nuevo e inédito. Porque haceros a la idea de que van a pasar dos o tres años hasta que Adele vuelva a grabar otro disco. Y no hay nada peor que ir el primero con toda tu buena fé a comprarte un disco, sin haberlo escuchado, y que al año siguiente lo reediten con más material. Eso tiene un único nombre: Maltrato al fan. Y esta gentuza de las discográficas es algo que vienen haciendo sistemáticamente desde hace unos años.
De hecho, uno de los temas nuevos en su vida sobre el que componer es la maternidad y pensó sabiamente que si dedicaba un disco monográfico a este tema iba a ser un auténtico aburrimiento. Y lo redujo a un único corte: La canción Nº11 Sweet Devotion está dedicado a su nuevo estatus de madre.
Entre los productores del álbum nos encontramos con Danger Mouse, Samuel Dixon, Paul Epworth, Greg Kurstin, Max Martin, Linda Perry, Ariel Rechtshaid, Mark Ronson, Shellback, The Smeezingtons y Ryan Tedder. Os aseguramos que los hemos recortado y pegado de una ficha técnica del disco, porque hubiera sido imposible memorizarlos todos.
El disco se presenta de momento en una edición normal con 11 cortes. Nosotros no nos daríamos mucha prisa en comprarla, la verdad. Existe también una edición limitadísima -y carísima- con tres canciones más. Recomendamos que compréis la segunda y que si tenéis que esperar un tiempo a que deje de ser "limitadísima" y "carísima" que lo hagáis. Seguro que acaba bajando de precio. Es más, casi mejor que escuchéis este disco en Spotify y que no lo compreis hasta las Navidades del 2016, que seguro que para entonces lo reeditan con un bonus-track bastante completo y con algún single nuevo e inédito. Porque haceros a la idea de que van a pasar dos o tres años hasta que Adele vuelva a grabar otro disco. Y no hay nada peor que ir el primero con toda tu buena fé a comprarte un disco, sin haberlo escuchado, y que al año siguiente lo reediten con más material. Eso tiene un único nombre: Maltrato al fan. Y esta gentuza de las discográficas es algo que vienen haciendo sistemáticamente desde hace unos años.
JOder!! qué dos temazos que se ha marcado la tía con "Hello" y "When...". A pesar de mi piel rockeril amo a esta mujer, la fuerza de su garganta, cómo domina los registros, la profundidad de sus composiciones. Me encanta!!!. No creo que vaya a decepcionarnos a estas alturas, esta mujer es muy perfeccionista y no sabe dormirse en los laureles.
ResponderEliminarSaludos!
@ Pupilo Dilatado
ResponderEliminarEl disco es igual de bueno que el anterior, ni mejor, ni peor. Lo de pedirle algo de riesgo a una cantante que ha alcanzado la dimensión de Adele es imposible. La fórmula no solo funciona, sino que consigue engatusar a público de todas las edades. Así que... ¿Para qué cambiarla?
Y sí, son temazos. Pero temazos condenados a que los escuchemos en el hilo musical del supermercado mientras ponemos una malla de patatas en el carro. Es también lo que tiene ser una superventas. A pesar de todo eso, Adele tiene tanta credibilidad cantando que todas estas cosas se le perdonan.
ResponderEliminarQué maravilla de voz tiene esta mujer. Y qué control.
Esa entrada con "Hello, it`s me" me sigue impactando incluso después de haberla escuchado un montón de veces.
Ambas canciones, las que has traído, me gustan mucho. Sin embargo, después de escuchar el disco, me esperaba más.
No me extraña que haya tardado tanto porque la presión ha tenido que ser terrible.
Incluso su aspecto ha cambiado. Ha pasado de aparecer en alguna actuación como una abuelita moderna a estar espléndida y guapísima.
Sí que son temazos, pero echo en falta canciones a la altura de "Set fire to the rain", o "Rolling in the deep", o "Love song", aunque esta última no sea suya.
Resumiendo, que esta mujer, con esa voz y ese control que comentaba al entrar, es capaz de mucho más. Me defraudaría si se quedara apalancada por miedo a arriesgar, o simplemente por comodidad.
También es verdad que es fácil para mí decírlo. Hay que encontrarse en su piel.
Yo cruzo los dedos por escucharla componer y cantar sin miedo, sin presión, y con ganas de sorprender.
Abrazote grande y gracias por el consejo.
@Maria
ResponderEliminarYo también esperaba más. Y ya lo he dicho en el texto, no sube el listón. Pero, al menos, tampoco lo baja. Porque es cierto que a priori faltan canciones como las que citas. Pero es cuestión de tiempo que dos o tres canciones de este álbum -a lo mejor, más- engrosen esa lista. Solo tienen que sonar un poco, que el disco no tiene ni un mes -Y vendió 3 millones de copias en menos de una semana-
Es evidente que la presión para una artista que ha conseguido un éxito como el de Adele es enorme. Esa fue la presión que mató a Amy Winehouse que tras un discazo como "Back To Black" estuvo prometiendo que su nuevo trabajo saldría en el 2009, luego en el 2010 y finalmente murió en el 2011 sin haber compuesto ni grabado absolutamente nada -Lo que existe son descartes de sus dos primeros álbumes- porque ella estaba más ocupada en beberse la vida. Nos cuentan que sí que dejó cosas de ese inexistente y futurible tercer álbum. Y que ya saldrán. Pero hasta que no lo vea, no lo creeré.
Aunque esto de las carreras post-mortem empieza a ser bastante cansino. Es inexplicable como gente que lleva lustros criando malvas, editen prácticamente más que los vivos. Estas navidades tenemos disco nuevo de Elvis y otro de Eva Cassidy.
Volviendo a lo que decías de que al principio parecía una abuelilla moderna, la verdad es que les pasa a todas cuando empiezan. Uno de los ejemplos es Jennifer Hudson que era gordita y ahora de lo extremadamente delgada que está, está hasta fea. Adele afortunadamente, sigue siendo una mujer con curvas pero ha cambiado mucho sus estilismos y está bastante más guapa. En algunos vídeos de 19 su primer disco, le hacían unos planos cortísimos. Casi planos detalle como si fuera el Alien de Ridley Scott y no pudiera ser vista en su inmensidad. Y lo más flagrante fue cuando grabó el dueto aquel con Daniel Merriweather y a ella no la sacaron en el vídeo por gorda y pusieron en su lugar a una modelo anoréxica. Eso ocurrió porque era la Adele del principio, la pariente pobre de la Winehouse por la que nadie daba dos duros. La de ahora no lo hubiera consentido.
Yo estoy convencido de que Adele se va a apalancar como les pasa a casi todas. Y pongo como ejemplo a mi amada Katie Melua que arriesgó mucho con The House (2010) pero esa incursión pasará a la historia más como una meada fuera de tiesto que como otra cosa y pronto volvió a su faceta más edulcorada porque la gente nunca entendió ese disco, que por supuesto, aquí defendimos con uñas y dientes. Porque era un discazo y nos descubría a una Katie Melua con muchísimos más registros que el de ser la Norah Jones Georgiana. Pero parece ser que a la gente le encanta ese tipo de etiquetas.