viernes, 10 de junio de 2016

INCUESTIONABLES RADIOHEAD


Que lejos quedan los RADIOHEAD de los 90 con himnos como Creep, High & Dry, Fake Plastic Trees, Paranoid Android, Karma Police o No Surprises, la mayoría de ellos extraídos de los míticos The Bends (1995) y OK Computer (1997). Mucho nos tememos que esos Radiohead no volverán nunca. Y no nos engañemos, tampoco hay ninguna intención por parte de la banda de recuperar viejas fórmulas del pasado. No lo decimos por desdeñar todo lo que vino después, como los revolucionarios Kid A (2000) y Amnesiac (2001) que marcarían esa ruptura con lo anterior y el inicio de una etapa electrónica y algo más experimental.
Quince años después de Amnesiac (2001) y otros tantos álbumes publicados, RADIOHEAD vuelve con A MOON SHAPED POOL, que saldrá a la venta en formato físico el próximo día 17 -ya está disponible en descargas- y es uno de esos trabajos que encabezarán las diferentes listas de los mejores discos del año de la prensa especializada, a tenor de la recepción crítica que está teniendo.
Aunque empieza a ser costumbre que un disco de Radiohead sea calificado de Obra Maestra y nadie se atreva a cuestionarlo.



Nosotros sí que lo cuestionamos. Porque efectivamente, su factura es impecable como siempre. Y esta vez, además tiene la particularidad de que las canciones tienen una grandilocuencia y una amplitud sonora descomunal, en parte gracias a la sección de cuerda y los coros de la London Contemporary Orchestra. Todo el disco rezuma calidad por los cuatro costados. Pero... ¿Por qué nos dá la sensación de que las canciones no van a perdurar en nuestra memoria como lo hicieron las canciones que hemos comentado al principio? Y, por supuesto, que tampoco serán canciones que abanderen una generación, como aquellas. Es cierto que pedirles algo así, es demasiado. Pero para este que suscribe, justo ahí es donde reside la diferencia entre una Obra Maestra y un simple disco excelente, que no es poco. El tiempo dirá cual de las dos cosas es A MOON SHAPED POOL. Aunque nosotros nos aventuraríamos a decir que es lo segundo.




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