Menos mal que siempre hay un disco que nos proporciona esa pasión de la que hablábamos el último día y estábamos esperando ansiosamente este PUNISHER de PHOEBE BRIDGERS que es su segundo trabajo en solitario. Aunque es un segundo trabajo poco convencional en el sentido de que Bridgers, a pesar de sus 25 años, ha tenido tres años para crecer compaginando su carrera con dos proyectos musicales: Boygenius junto con Julien Baker y Lucy Dacus en el 2018 o Better Oblivion Community Center con el gran Conor Oberst en 2019 que fue Top5 en nuestra lista del año pasado. Lo que significa que parece que ha pasado una eternidad desde que se editara su brillante álbum debut Strangers In The Alps (2017) (Top3 en nuestra lista de los mejores álbumes de 2017).
Y que todo ese rodaje y evolución de Bridgers como músico y compositora ha propiciado que este disco sea bastante mejor que todo lo que ha hecho hasta este momento sola o acompañada. Recupera a sus productores de su álbum debut Tony Berg y Ethan Gruska además de ella misma que también ejerce de productora y Mike Mogis. En el apartado de colaboraciones es un sueño hecho realidad: Sus amigos Conor Oberst, Lucy Dacus y Julien Baker aparecen. Pero no queda ahí la cosa: Blake Mills, Jenny Lee Lindberg y el violin de nuestra Sara Watkins son otros de los alicientes de este álbum.
A la crítica el disco le ha gustado y se ha convertido en otro de los discos mejores valorados del año. Para NME es un 100 sobre 100 y la nota más baja es un 80 sobre 100 por parte de publicaciones como Mojo, Rolling Stone o American Songwriter. La media general del disco es de 91 sobre 100.
Nosotros lo tenemos muy claro, ha superado todas nuestras expectativas. Imaginábamos que sería un buen disco, pero es que roza la perfección. Es una obra maestra de la música contemporánea. Nuestra puntuación es un 100 sobre 100. Seguimos encontrando a Phoebe Bridgers ese parecido con Aimee Mann que dijimos hace tiempo y que solo nosotros hemos comentado y ya no creemos que sea la coincidencia de compartir productor (Berg). No nos preguntéis quien nos gusta más de las dos, que no sabríamos qué responder. Lo que sí nos gustaría destacar es el carrerón que tiene la Bridgers por delante, porque si antes de los 25 nos ha dado todo esto... Esperamos estar vivos para ver hasta donde puede llegar.
VALORACIÓN EXQUISITECES: 100/100
MEDIA DE LA CRÍTICA: 91/100
Que maravilla!
ResponderEliminar@ SALVADÓ fotografies
ResponderEliminarLo es. Y un disco candidato a ser Top1 de nuestra lista de los mejores álbumes de este año.
Qué bien me lo estoy pasando estás semanas con este disco.
ResponderEliminarEs verdad que Kyoto es especialmente alegre y quizá en eso distinta.
The End is Near al final nos pone los pelos de punta.
Candidato a favorito 2020
@ Phoebe Bridgers
ResponderEliminarEn "Kyoto" nos hablaba de cosas como su relación con su padre y el síndrome del impostor, es extraño que haya quedado mínimamente alegre. :) Y la canción del final a mi me agobia especialmente la parte de la falta de respiración, básicamente porque tengo oxígeno en casa por si las cosas se ponen muy feas -Es muy probable que en mi próxima cita con el neumólogo me lo quiten porque ya estoy muy mejorado y solo lo uso puntualmente- pero me agobia todo lo que tenga que ver con falta de respiración.
Para mi también es candidato a favoritísimo. Muy mal se tiene que dar para que no esté entre los cinco primeros de nuestra lista. Y este lo pienso defender a hostias si hace falta, que ya estoy hasta los c....... de que por la jodida objetividad, los discos que más me gustan acaben en la cola. Podría llevar 5 meses criando malvas y eso ha cambiado mucho mi perspectiva de las cosas, de las importantes y de otras que no lo son tanto. Creo que la lista de este año -si lo termino- va a ser completamente onanística. Esas listas que siempre he criticado tanto a otra gente que se les ve el plumero y son 0 objetivos. Pues pienso hacer la peor de todas :) -Eso lo digo ahora, luego soy incapaz-