En Monster (2021), un álbum que es mucho mejor de lo que se dijo y que muy poca gente entendió, TOM ODELL cruzó un punto de no retorno con una serie de canciones incómodas para el gran público sobre la salud mental, la depresión y la ansiedad. Recuerdo que dijimos que era ese álbum oscuro, diferente a todo lo que se ha hecho anteriormente, que te hace perder fans. Aunque, a decir verdad, todos los que huyeron despavoridos tras este trabajo es un público que cualquier artista que esté madurando, quiera trascender y consagrarse, no necesita. En realidad, se quitan un enorme lastre de encima con la estampida de ese tipo de público. Como dijimos, es pura selección natural. A pesar de todo, Monsters (2021) no era un disco anticomercial en su forma, en su fondo sí lo era. Pero musicalmente era un trabajo bastante ecléctico. Este fin de semana se ha publicado BEST DAY OF MY LIFE y esta vez sí que estamos hablando de un trabajo que no hace ningún tipo de concesiones a la comercialidad. Musicalmente Odell ha reducido todos los efectos posibles, es un álbum minimalista en el que solamente prima piano y voz, como mucho algunas armonías puntuales y la creación de bellas atmósferas. Son cortes breves pero muy contundentes por su honestidad, sinceridad y a veces crudeza. Es cierto que existe un atisbo de esperanza en canciones como Smiling At The Way Home y que el título del álbum BEST DAY OF MY LIFE te hace pensar que algunas cosas han cambiado a mejor desde Monsters (2021). Pero no han cambiado. La canción Best Day Of My Life es toda una montaña rusa emocional. Y cuando escuchas el siguiente corte, Sad Anymore, empatizas con él y piensas en lo mal que lo debe estar pasando y lo imaginas repitiendo ese mantra cada mañana frente al espejo para poder continuar existiendo. Realmente una de las cosas que mejora en este trabajo con respecto a Monsters (2021) es que consigue que el oyente empatice con lo que se le está contando y se pueda llegar a sentir identificado. Quizás Monsters (2021) presentaba un muro que distanciaba al receptor y que se ha roto con este trabajo. TOM ODELL no está solo en esto aunque lo parezca, su cómplice se llama Laurie Blondell que co-escribe y co-produce este álbum junto a él.
En el momento que escribimos esta reseña BEST DAY OF MY LIFE no está en Metacritic y solamente se han pronunciado tres medios importantes que sí están recogidos en Albumoftheyear (otra página similar a Metacritic que usa la media aritmética, en vez del algoritmo de aproximación). Los tres medios que lo han valorado son The Telegraph que le ha otorgado el pleno, el 100/100 y para Gigwise y Clash es un 80/100. De momento la media crítica se establece en un 87 sobre 100 y se convierte, de lejos, en el álbum mejor valorado de su carrera. Habrá que ver si mantiene esa media. Intuimos que sí. Estamos convencidos de que el resto de la prensa especializada que queda por valorarlo, lo hará al alza. A nosotros nos parece que se publique hoy día un álbum como BEST DAY OF MY LIFE toda una lección por parte de la industria musical británica, solamente por el hecho de que se apueste por álbumes como este, especialmente si viene firmado por alguien que fabricó hits tan brutales en el pasado como Another Love (2013), que todavía se siguen viralizando. Es una mezcla de sentimientos lo que nos ha provocado por diferentes motivos. Por un lado porque a pesar de la crudeza, es un álbum bastante didáctico que puede ser incluso sanador para muchos que hayan sentido todo lo que nos cuenta en sus letras. Luego está la parte anticomercial. Probablemente será el álbum menos vendido de su carrera, pero... ¡Qué pena que no lo hubiera llegado a hacer solamente por ese motivo! Nos hubiéramos perdido una Obra Maestra y mucha gente no se hubiera enterado por fin de que Tom Odell es el cantautor británico más interesante y de mayor talento de todos los de su generación. Algo que llevamos observando disco a disco y que hemos dicho en numerosas ocasiones ante la incredulidad de muchísimos lectores que ni se molestan en escribir un comentario para rebatirlo. Porque piensan que solamente es el One-Hit Wonder de Another Love (2013) y nos hemos vuelto todos locos. No tenemos ninguna duda de que BEST DAY OF MY LIFE es un 100 sobre 100 y una gran sorpresa con la que casi nadie contaba.
MEDIA DE LA CRÍTICA: 87/100
VALORACIÓN EQUISITECES: 100/100