Se ha editado recientemente el álbum debut de CHARLIE HICKEY titulado NERVOUS AT NIGHT después de su prometedor Ep Count The Stairs (2021). NERVOUS AT NIGHT está producido por Marshall Vore y todos los cortes están co-escritos por Charlie Hickey y Marshall Vore, excepto tres de ellos que se acreditan de la siguiente manera: Hickey, Vore y Cara Salamando, el primero; Hickey, Vore y Morgan Travis, el segundo y Charlie Hickey y Christian Lee Hutson el tercero. También encotramos colaboraciones de otros músicos de Los Angeles como Harrison Whitford y Mason Stoops. Y ya que sale a colación el nombre de Christian Lee Hutson, tenemos que decir que este álbum de CHARLIE HICKEY está un poco en la misma onda que algunos de los álbumes de Lee Hutson y todos estos artistas de pop indie que han despuntado en los cinco últimos años como Phoebe Bridgers y que están haciendo algo realmente distinto dentro del género. Un álbum intimista, introspectivo que habla de relaciones personales y amorosas fallidas, de la ansiedad y el dolor que produce y que intuimos que se basan en las propias experiencias de su autor en sus primeros años siendo adulto. Todo ello en un aire muy californiano -Hay referencias a la ciudad natal de Hickey, Pasadena- Un álbum realmente interesante para aquellos que no hayan superado una ruptura amorosa y puedan identificarse con algunos de esos momentos "Nervous At Night" que describe en sus canciones. Por cierto, Charlie Hickey es hijo del legendario Chris Hickey, pero son muy distintos y cada uno de ellos realmente pertenece a su propio tiempo y circunstancias.
En cuanto a los críticos, como de costumbre vuelven a infravalorar un muy buen disco. Es la tónica habitual con los cantautores folk. The Line Of Best Fit 80/100; DIY y The Young Folks 70/100; Pitchfork 69/100 y Dork 60/100 para terminar con una media crítica de 70 sobre 100. Media que nos parece bastante injusta, porque solo por lo que supone un trabajo en el que un hombre se muestra vulnerable sin ningún atisbo de masculinidad frágil, eso ya es para empezar a puntuar alto, de entrada. Porque como decíamos anteriormente, este es el tipo de discos del Siglo XXI. En el que los hombres no temen expresar sus sentimientos sin que sean juzgados y si a eso le sumamos que todas las canciones (predominantemente baladas) están muy bien cimentadas en una buena base musical, no podríamos darle menos de un 95 sobre 100 y no le damos el 100/100 porque consideramos que otros discos que juegan en esta misma liga son ligeramente superiores a este, lease Quitters (2022) de Christian Lee Hutson, por ejemplo. Pero sin duda, es de lo mejor que hemos escuchado desde que dimos nuestra última nota más alta.
MEDIA DE LA CRÍTICA: 70/100
VALORACIÓN EXQUISITECES: 95/100