Nos encanta que nuestra querida SHAWN COLVIN esté tan activa. Si todavía no hemos olvidado su excelente álbum del 2012 All Fall Down, ni Uncover el inmejorable disco de versiones que nos regaló el año pasado, ahora regresa con su gran amigo STEVE EARLE, una de las leyendas vivientes del folk y el Country americano. Este disco surgió porque Earle quedó maravillado con una serie de conciertos que dieron juntos hace un par de años y ni corto ni perezoso le propuso a Shawn Colvin que grabasen un álbum de estudio que recogiese la esencia de esos espectáculos en vivo y para ello coescribieron material inédito y también recurrieron a grandes versiones de temas clásicos como Ruby Tuesday de The Rolling Stones o Raise The Dead de Emmylou Harris. El disco está producido por el propio Earle y se grabó en Nashville en casa de Buddy Miller.
Decir que es un disco excelente, es poco menos que una obviedad. Se tendrían que conjurar todos los planetas en contra de dos genios de la talla de COLVIN & EARLE para que algo pudiera salir mal. ¡Es que es imposible que algo salga mal! Especialmente cuando hablamos de tantísima veteranía y profesionalidad; valores añadidos que se podrían quedar en simples virtudes si las canciones no llegaran a emocionar. Pero es que, además, lo consiguen. Y la complicidad entre los dos artistas es perfecta. No nos extrañaría que esto fuese el inicio de una serie de colaboraciones.
Está claro que el 2016 está siendo el año de los discos compartidos: Colvin & Earle, Case Lang Veirs y Sam Beam & Jesca Hoop todos ellos seguramente aparecerán en nuestra lista de los mejores discos del 2016 en puestos destacados.
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