Siempre que tenemos oportunidad de hablar de JONATHA BROOKE lo hacemos, porque no es ningún secreto que es una de nuestras singer-songwriter preferidas. Últimamente utilizamos más la palabra singer-songwriter del inglés, que cantautor o cantautora. Porque en castellano es una palabra que adquiere una cierta carga negativa y tampoco es totalmente representativa del tipo de artista que escribimos. Aunque su signifiacado sea el mismo.
Una vez hecha esta aclaración, continuaremos diciendo que el año pasado, justo cuando nosotros ya habíamos cerrado nuestra lista de los mejores álbumes del 2016, Brooke publicó MIDNIGHT. HALLELUJAH, así que como muchos otros discos que se editaron en el último bimestre del 2016, se tendrá en cuenta para la lista del año que viene. Después de todo, la mayoría de los singles de esos álbumes se van a ir desgranando durante el 2017.
Si hemos tardado en escribir la reseña es simplemente porque ya sabéis que los blogs necesitamos los vídeos de Youtube que ilustran estas entradas -Luego se caen cuando menos te lo esperas y se quedan totalmente deslucidas- y JONATHA BROOKE es tan indie, y está tan al margen de la industria, que se toma su tiempo para subir los vídeos, siempre en directo o de algún momento en el estudio de grabación. Y no disponíamos de demasiados vídeos dónde elegir hace dos meses. La espera ha merecido la pena.
Y que decir de JONATHA BROOKE que no hayamos dicho antes... Pues simplemente que disco tras disco se supera a sí misma. Es muy atrevida con los proyectos que aborda, aunque esta vez MIDNIGHT. HALELLUJAH no es un musical, ni la adaptación de textos inéditos de un autor como Woody Guthrie, como sus dos excelentes trabajos anteriores. Pero si hablamos de la composición de las canciones de este nuevo álbum, podríamos decir que son toda una lección magistral. Son canciones concretas, muy directas tanto en la forma como en el fondo. Y de nuevo, destacar la riqueza de las letras de la Brooke. Capaz de transformar lo cotidiano en una experiencia sublime. Una gran narradora de historias -o story-teller- que te sumerge en un mundo del que no quieres salir.
Y si hablamos de la JONATHA BROOKE músico, es una excelente guitarrista muy dotada y capacitada para dirigir la producción musical de cada uno de sus trabajos, y lo vuelve a hacer en MIDNIGHT. HALELLUJAH aunque esta vez ha contado también con tres productores adicionales Mark Hornsby, Phil Naish y Eric Bazilian. En cuanto al resultado... No sabríamos decir si es el mejor álbum de Jonatha Brooke, porque no recordamos un disco malo suyo en casi veinte años de carrera. El nivel es altísimo y ella nunca baja el listón. Al contrario, siempre percibes pequeños detalles en sus canciones, que dán la sensación de que está subiendo ese listón constantemente. Es una artista en crecimiento constante y a la que la madurez le está sentando francamente bien en todos los aspectos. Nosotros no solamente recomendaríamos MIDNIGHT. HALLELUJAH, que lo hacemos encarecidamente. Recomedaríamos su obra completa.